Barcelona, 25 de abril de 2025 —

El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado la reedición de la histórica campaña “Barcelona Posa’t Guapa”, una ambiciosa iniciativa que busca rehabilitar hasta 25.000 viviendas al año con el objetivo de alcanzar la renovación del 80% del parque residencial antes de 2050.

La campaña, que en los años 90 contribuyó decisivamente a la mejora de las fachadas y edificios emblemáticos de la ciudad, vuelve con un enfoque renovado: poner el acento en la sostenibilidad, la eficiencia energética y la accesibilidad de los edificios. La propuesta fue aprobada en el Pleno Municipal con el apoyo del PSC y BComú, garantizando así su impulso institucional y su continuidad a largo plazo.

Un reto para transformar la ciudad

Actualmente, Barcelona cuenta con un parque de viviendas envejecido: cerca del 60% de los edificios tienen más de 50 años y muchos requieren intervenciones urgentes. Con esta nueva etapa del programa, se pretende actuar de forma prioritaria en barrios como el Raval, Nou Barris, Poble-sec y zonas del Eixample, donde el deterioro es más acusado.

El plan de acción no solo contempla rehabilitaciones estéticas, sino también intervenciones de fondo que mejoren el aislamiento térmico, optimicen el consumo energético y adapten los inmuebles a las necesidades de accesibilidad para personas mayores o con movilidad reducida.

Subvenciones y ayudas para comunidades de propietarios

Una de las grandes novedades es la implementación de nuevas líneas de ayudas públicas destinadas a las comunidades de propietarios, que podrán cubrir hasta un 80% del coste de las obras si estas incluyen criterios de sostenibilidad o accesibilidad.

Los técnicos municipales ofrecerán además asesoramiento gratuito para guiar a las comunidades en la solicitud de subvenciones, la contratación de profesionales y la planificación de las obras.

Una oportunidad para el sector de la construcción

El relanzamiento de “Barcelona Posa’t Guapa” supone una gran oportunidad para el sector de la construcción, especialmente para empresas especializadas en rehabilitación, eficiencia energética y restauración patrimonial. Se estima que el plan podría generar miles de empleos en los próximos años, contribuyendo además al impulso de una ciudad más verde, habitable y resiliente.

Con esta iniciativa, Barcelona reafirma su apuesta por un modelo urbano que combina la conservación de su patrimonio arquitectónico con los retos de la emergencia climática y la justicia social.